Calder y Picasso

Los dos artistas participaron juntos en el pabellón español de la Exposición Universal de París en 1937, al que el visitante accedía por la planta baja, donde se celebraban conferencias, eventos y encuentros.

Fue en este espacio donde el Guernica de Picasso dialogaba con la Fuente de mercurio de Alexandre Calder, aunque los dos artistas habían tenido ocasión de conocerse ya antes. Desde hacía unos diez años, Calder producía móviles abstractos y mostraba un gran interés por las esculturas de alambre de Picasso. Así pues, el pintor estuvo en el origen de la escultura llamada “transparente”, que aparece como el resultado de un “dibujo en el espacio”. Ambos artistas, cada uno a su manera, abrieron nuevas perspectivas, buscando un nuevo gesto y otro tipo de relación tanto con el espacio como con el espectador dentro del espacio, otra manera de acercarse a los materiales en términos de masa, peso y resistencia, así como de ligereza o de poesía.

Mediante la exploración de temáticas figurativas y abstractas, la exposición “Calder-Picasso” estudia la expresión de la "ausencia de espacio" en las obras de ambos artistas, en sus resonancias y en sus diferencias. La propuesta parte de las relaciones entre los dos hombres, sus puntos en común, sus encuentros, sus colaboraciones artísticas y la confrontación de sus obras. Se reúnen cerca de 150 piezas en un recorrido temático que utiliza el encuentro con el vacío como prisma de análisis de la tensiones conceptuales y formales sobre las que se apoyan sus respectivas creaciones.

 

"Calder-Picasso»
19 febrero - 25 agosto 2019
Exposición organizada en colaboración con la Calder Foundation y la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso para el Arte, presentada en el Museo Picasso Málaga en el otoño de 2019.

Picasso, Portrait de jeune fille
Picasso, Portrait de jeune fille, fechado arriba a la derecha «3 de abril XXXVI». Musée national Picasso-Paris.