El recorrido de lectura propuesto nos ha permitido desgajar la figura de una botella a través de cuatro relatos:
Estos cuatro relatos no están adheridos a la obra; es la obra la que genera sus propias instrucciones de lectura. El enfoque semiótico no es en absoluto el enfoque psicológico de una experiencia vivida, aunque pueda explicarlo. Es la explicitación de una estructura inmanente a la obra.
Por lo tanto, la semiótica puede proponer, justificándolas, nuevas lecturas. También puede inspirar a los historiadores nuevas vías de investigación: en este caso, serían los ejemplos de imágenes didácticas en la vida de Picasso, su presencia y su utilización en sus obras. O incluso retomar la noción de «arte impersonal» o «anónimo» en relación con el registro didáctico. La semiótica interroga también a los artistas sobre la permanencia de la tradición: aquí es sobre las reglas de composición clásicas integradas en una obra de vanguardia.
En este sentido, la semiótica, a semejanza de la historia del arte, dinamiza la investigación picassiana y, a cambio, interroga sus propios modelos teóricos y metodológicos.
Grégory Carteaux,
Licenciado en la Escuela del Louvre, doctorando en semiótica (Universidad París 8)