El "Retrato de Stalin", una condena a "su" familia

El 5 de marzo de 1953 murió Stalin. «Staline est mort»; la portada de l’Humanité reflejaba la enorme conmoción que el hecho provocó en toda la comunidad comunista. La sede del partido fue cubierta de banderolas negras y se organizó un gran mitin el 10 de marzo en el Vélodrome d’Hiver. Aragon encargó a Picasso un dibujo homenaje al generalísimo y «padre de los pueblos» para Les Lettres françaises. Picasso se inspiró en la foto del joven Stalin de 1903 y su dibujo provocó un escándalo en el seno del partido. Maurice Thorez se encontraba por entonces en la Unión Soviética, donde recibía atención médica desde hacía tres años. El secretariado del PCF condenó el retrato de Stalin dos días más tarde «sin poner en duda los sentimientos del gran artista Picasso, cuyo compromiso con la clase obrera es de todos conocido». Picasso no manifestó ningún arrepentimiento por el dibujo. «Llevé flores al entierro y mi ramo no gustó. Son cosas que pasan en todas las familias».[1] Viniendo de Picasso, esta frase era cualquier cosa menos banal. Conocemos su apego a la familia, su tribu. Para él, su pertenencia al partido comunista respondía a la misma filosofía, según la cual, cada miembro estaba vinculado tanto por la solidaridad como por el secreto, tanto por el respeto como por la discreción. Solo debía rendir cuentas a los miembros de su propia «familia», es decir, en este caso, a sus camaradas más cercanos del partido.

El secretariado forzó a Aragon a publicar en Les Lettres françaises un dossier de cartas airadas de condena que apareció en el número del 26 de marzo. En una de ellas en que André Fougeron cuestionaba la «probidad» del artista,[2] este escribió: «[¼] Mi tristeza se debe al hecho de que, si en 1953 un gran artista es incapaz de hacer un simple dibujo del hombre más amado por los proletarios del mundo entero, ello refleja la magnitud de nuestras debilidades en este terreno en un país como el nuestro que cuenta sin embargo con los mejores retratistas que ha conocido la pintura [¼]».[3]

Thorez, a punto de regresar a Francia, inquieto ante el riesgo de fractura entre el PCF y los intelectuales, declaró que desaprobaba la condena del Portrait de Staline. Y l'Humanité del 23 de abril de 1953, para refrendarlo, publicó en su portada una fotografía con el título: «Picasso visita a Maurice Thorez».[4]

Pero el PCF y su prensa ignoraron la gran presentación pública en Francia de Les Demoiselles d'Avignon (1907) dentro de la exposición de Jean Cassou en el Musée national d'Art moderne «Le Cubisme 1907-1914» (del 30 de enero al 9 de abril de 1953). El mismo año, el partido comunista italiano desempeñó un papel decisivo en la realización de una gran exposición suya en Roma y Milán. La iniciativa partió del senador comunista Eugenio Reale. Picasso decidió no prestar más que sus obras creadas entre 1920 y 1953, una decisión que dejaba fuera los periodos azul y rosa y la mayor parte de las obras maestras del periodo cubista, pero que reflejaba un gusto mucho más abierto que el de los comunistas franceses de su tiempo. Con todo, la exposición, que supuso para el PCI un formidable instrumento de propaganda, tuvo lugar en la Galleria Nazionale d'Arte Moderna y luego en el Palazzo Reale de Milán, donde se presentó Guernica. Palma Bucarelli, el director de la Galleria, tuvo que luchar denodadamente para que el gobierno de De Gasperi autorizara la exposición. A pesar de unos plazos cortísimos (solo se dedicaron dos meses a todo el proceso de organización), la exposición fue un éxito crítica y público.[5]

 

[1] Pierre Daix, Dictionnaire Picasso, Robert Laffont, 1995, p. 745 (le portrait de Staline).

[2] Annette Wieworka, «Picasso et Staline», Cahier de l’Herne Picasso, n°106, 2014, p.66.

[3] Pierre Daix, Dictionnaire Picasso, Robert Laffont, 1995, p. 377.

[4] Zoé Grumberg, «1953: Le 5 mars, Joseph Staline est mort», en 100 ans de parti communiste français, bajo la dirección de Guillaume Roubaud-Quashie, Le Cherche-Midi Editeur, 2020, pp. 80-81.

[5] Brunella Velardi, «Eugenio Reale e le retrospettive di Picasso del 1953 a Roma e Milano», unclosed.eu, octubre 2016.